jueves, 5 de abril de 2012

Un paseo gris

Estos días de cielos pesados y plomizos que descargan intermitentemente su peso en forma de tromba húmedo-sonora o se precipitan en levedad acuosa, no invitan más que a una melancolía que habita a sus anchas en las calles solitarias de mi ciudad, donde todos y todo parecen haber desaparecido. He salido a dar un paseo, a desentumecer mis neuronas y oxigenar mi mente. Son días de fiesta y aquí nada ni nadie se mueve así que he decidido aparcar por unos días las malas nuevas que me ha deparado mi presente para afrontarlas con fuerzas renovadas cuando el ritmo de las horas vuelva a su estado normal y me he dejado llevar por la melancolía gris de la mañana, la que te arrastra por la memoria y se detiene en el rincón de los recuerdos más preciados. Instantes de una vida que atrapamos con los sentidos, recuerdos de tesoros vividos que guardamos celosamente bajo llave y que solo a veces destapamos. Para no gastarlos, para revivirlos una vez más cuando el deseo nos lleva hasta ellos y dejamos que colonicen nuestro ser. Así, cuando se expanden, el corazón late más deprisa. Puedes incluso estremecerte nuevamente, sentir como las sensaciones te recorren, abandonarte al placer de lo vivido y disfrutar una vez más del tiempo que fue. Puedes dejarte llevar y luego..., tan solo regresar y contemplar la plomiza mañana que te llevó de paseo por el recuerdo.

Sounds of memory...


Hard Rain - Diamonds (1988)