Ella huía de espejismos de horas de más.
El valor para marcharse, el miedo a llegar.
Todos duermen ya.
Todos duermen ya.
Se quitó la ropa sueña con despertar
en otro tiempo y en otra ciudad.
Dejarse llevar.
Dejarse llevar.
Jugar al azar nunca saber
donde puedes terminar o empezar.
Dejarse llevar suena demasiado bien.
Dejarse llevar suena demasiado bien.
Vetusta Morla - Copenhague