lunes, 15 de abril de 2013

Hoy

Cuanto voy a echar de menos este sitio. El hogar-lugar de la comprensión. Donde la soledad más absoluta y el silencio casi sepulcral permite que te desmenuces comenzando por el "estar" para llegar finalmente al "ser". Este in pass en mi vida siempre será un antes y un después. No me marcharé como vine ni volveré como fui. Estoy quemando los últimos cartuchos aquí. Aprovechando para reordenar y reubicar lo de dentro y lo de alrededor. Vivo en una calle con nombre de poeta que desemboca en una tranquila avenida que se llama "La Senda del Recuerdo". Siempre me encantó el nombre.

Hoy amanecí temprano y salí para desayunar. Aquí los días siempre invitan a vivir así que cambié de opinión y antes del desayuno, nos fuimos a pasear. Nos fuimos, je, como si fuéramos multitud. En realidad somos ella y yo. La que me habla mientras camino en silencio, a la que escucho mientras observo y a la que contesto o rectifico. Aunque finalmente, ella siempre me enseña a mi. Es porque ella está más centrada en las cosas y no se deja llevar como yo por tanto sentimentalismo que no lleva a ningún sitio. Y así se nos pasan los días. Y entre paseo y paseo, día tras día, pues nos vamos poniendo de acuerdo.

Es pronto, aún quedan muchas cosas por hacer hoy, muchos momentos aún por disfrutar. Tengo que respirarlo todo y engullirlo porque se me escapa de las manos esta oportunidad. No habrá más paseos entre cultivos, ni olas de mar azul, ni acrobacias que pintan corazones en el cielo, ni brisa salobre, ni caricias doradas en los pies, ni... tantas cosas que fijaré en mis retinas.

Desayunamos. Primera interacción hoy con la humanidad.

- Hola. Me pones un café con leche en vaso, una tostada entera con mantequilla y mermelada. Y me puedes poner un vaso de agua, por favor?

- Si, claro. La tostada, ¿entera o media?

- Entera, entera. Y me voy a sentar fuera, vale?

- Si, muy bien.

Al rato, porque aquí no hay prisas, llega el vaso de agua y un café con leche pero en taza. Bueno, que se le va a hacer. No es tan importante. Pongo el azúcar al café, remuevo con la cucharita y pruebo. El café está no solo malo sino frío y sabiendo lo que tardan con la tostada, para cuando quiera dar cuenta de él, estará helado. Odio el café frío. Empezamos mal, me has fastidiado ya el placer del desayuno. Aunque te diga que me pongas otro, que me eches leche más caliente o cualquier otra cosa para remediar el desastre, ya no será el desayuno que esperaba. En fin, paso, me centro en el piar de los pajaritos y en la delicia del sol.

La tostada empieza a tardar y el café se va enfriando más si cabe. De repente hace su aparición.

Un plato. La tostada, que no se llegó a tostar aunque creí que llegaría chamuscada, no es entera sino media. Lo va a poner sobre la mesa y la mitad de la mitad de la barrita, se cae al suelo. Bien!!! Arrrggg, qué horror chiquita. Tan de mañana y estropeando el día. En fin, he desayunado obviando tanto error. Lo olvidé con el gusto de la mermelada al sol deshaciéndose en la boca y lo recordé nuevamente con el último trago helado del café. Lo pagué todo pensando en si algún día se preguntará y entenderá porqué su negocio fracasó.

Volvía a casa conversando con esa otra que va en mi. Yo me quejaba de haber dejado de fumar y ella me decía: Estaba en la planificación que hicistes hace tiempo. Te acuerdas?. Pues si, claro que me acuerdo. Pero la tarea se torció. Bueno, pues ahora la enderezamos y seguimos. Hemos pasado unos días de desencuentro. Ella insistía en dejar de fumar y yo le pedía siempre un día más. Hasta que finalmente nos ponemos de acuerdo y para cuando desfallezco, pues ella está ahí y me lo recuerda. Así es como andamos ella y yo.

He hecho un planing para hoy. Tenía también charla con la psicóloga que ha resultado muy interesante, aunque curiosamente hoy me ha contado ella alguno de sus problemas a mi. Si esto va a ser un ten con ten, debería recibir yo también honorarios. O acaso ellos no aprenden? Bueno, me ha mandado un ejercicio interesante. Ya lo he hecho yo mentalmente muchas veces, pero ahora me  toca escribir y como no estaba en el planing de hoy, pues habrá que incluirlo en el de mañana. Dice que es para ir deshaciendo nudos, pufff, pues el primero es jodido de deshacer y eso que está anclado en los tiempos  más lejanos. Esto de los psicólogos tiene que tener una parte de morbo, no? Son como "voyeur" de las vidas ajenas. Una camina por el mundo con su historia a cuestas y al resguardo de casi todos y de repente, metes en tu vida a un psicólogo y empieza como a tiritarte el corazón de frío. Escarba y escarba hasta hacerte creer que acabará llevándote al útero materno. Acaba al final por conocer incluso lo que no contaste a tus parejas. No es que haya sido muy productivo por ahora. Quizás para los que no hacen el ejercicio de hablar, puede ser una buena terapia el ir soltando lastre pero yo que me tengo más que hablada a mi misma, no se trata de hablar sino de encontrar la "forma de". Podría contarte el problema sin tener que contarte mi vida pero como crees que yo no habré analizado bien, pues hay que ir contando poco a poco y explicar y aclarar y no sé yo si alguno de los episodios me serán muy gratos de recordar y más aún de desmenuzar. Pero bueno, seguiremos por ahora y veremos hasta donde llegamos.

Me he marchado después a la playa porque forma parte de mi terapia particular (la física y la mental) y claro, he cogido un libro. Con tanta literatura que empieza a ocupar las cajas, me pregunto para qué sigo comprando libros si lo que debería hacer es releer. Y más teniendo en cuenta que el poso que dejaron en mi se fue diluyendo con el tiempo hasta sentir tan solo una sensación, placentera o no, de lo que fue la lectura de cada uno de ellos. Bueno, he cogido a Nietzsche (se escribe asi?, siempre dudé del orden de las consonantes) que no sé yo si será lo mejor para estos tiempos pero con él me he marchado aunque finalmente no lo he llegado a leer. Me acoplé los cascos y decidí dejarme llevar por sonidos que hacía muchos días que no escuchaba. Apenas he aguantado dos horitas y me he vuelto para comprar comida. Tengo que recuperar los kilos perdidos y que no me sobraban.

Parece que no estoy para planificar más allá del día de hoy. No he comprado comida para mañana ni he organizado las cosas que he de hacer a partir de hoy. Ahora me esperan las cajas, así que me voy a poner a currar...

Uhmm, y tenemos lluvia de estrellas esta semana. ¿Las líridas se van a dejar ver? Pues si se dejan, las veremos.

Hace mucho que no pongo musica con las entradas, salvo las que son música en si. Un tema de la carpeta de los 90 que seleccioné en la playa y que me costó en su momento averiguar de quien era.  Siempre hay algún amigo que me saca de apuros con las canciones. Un grupo inglés que se inició a principios de los 80 con toquecitos obscuros de esos que me gustan y en este en particular, con un ligero toque barroco que me encanta.

And Also The Trees - Dialogue (1993)

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