lunes, 6 de mayo de 2013

Así andamos...



Ella huía de espejismos de horas de más.
El valor para marcharse, el miedo a llegar.
Todos duermen ya. 
Se quitó la ropa sueña con despertar
en otro tiempo y en otra ciudad.
Dejarse llevar.
Jugar al azar nunca saber
donde puedes terminar o empezar.
Dejarse llevar suena demasiado bien.


Vetusta Morla - Copenhague